lunes, 6 de enero de 2014

Blue Jasmine (Jazmín Azul)

Dirección: Woody Allen / Guión: Woody Allen / Año: 2013


Esta fue el primer estreno que vi en este año. La verdad había escuchado mucho sobre ella, tanto en los medios como en personas que conozco. Lo que todas las críticas tenían en común fue la soberbia actuación de Cate Blanchett como Jasmine, una mujer de clase por encima de la alta, caída en desgracia. Y la verdad, el día que fui a verla en efecto, ésta es la actuación de su vida.

Para empezar, hablemos un poco sobre la trama de la película. Jasmine es una mujer adinerada, casada con el esposo perfecto a sus ojos, y su mayor complicación es decidir que bolso es el mejor para cada evento, pero su esposo ideal no lo es tanto y es enviado a la cárcel, Jazmín lo pierde todo, el dinero, la casa, su abrigos de piel y sus amigos. Así que tras un evento psicótico, tiene que irse a vivir con su hermana, interpretada maravillosamente por Sally Hawkins, quien es todo lo opuesto a Jasmine. Ahí llega  a un pequeño departamento de Brooklyn donde queda atrapada en el catastrófico presente y renuente a abandonar su vida pasada.

Woody Allen es sinónimo de calidad ya sea en mayor o menor medida. Yo no soy especialmente fanático de sus películas, a pesar de que cuenta con algunas que me fascinan como lo son Match Point, Midnight in Paris, Annie Hall. Su sentido del humor es muy especial y no para todos los gustos, pero a pesar de ello, no se puede negar que es un excelente director y guionista, sobre todo esto último. 


El guion de Woody y la soberbia actuación de Cate nos adentran en el mundo de esta mujer que no es para nada una heroína, tampoco una mujer con mala suerte. Cada decisión que toma Jasmine, la adentran más y más en esa tumba de neurosis, histerias y autonegación en la que vive. Jasmine se cree superior a toda persona con la que convive en los barrios bajos, al tiempo que hace todo lo que está a su alcance para regresar al estatus social que le corresponde, sin importar a quién lastima.

Algo interesante de ésta película, y en relación a Woody Allen, es que es la primer película en la cual no siento que la ciudad donde se desarrolla sea un personaje más de la trama, siento que da igual el lugar siempre y cuando sea un lugar muy rico y uno clase baja. Esto en lo personal me llamó mucho la atención debido a que en sus demás films se logra sentir una ciudad viva y poseedora de una personalidad muy definida, y en ésta no lo percibí. 


La película es bastante buena, aunque me dejó un sabor agridulce al terminar. Esto se debe a varios factores, uno de ellos es la actitud de Jasmine, ya que durante toda la historia, me molestaba mucho su actitud, pero por otro lado me maravillaba ver cómo ella vivía en un mundo ajeno al de los demás, sus pláticas con nadie y sus cambios bruscos de sentimientos. También debo de culpar al tráiler (bien sabemos que no hay que creerles) ya que yo me esperaba una comedia ácida. Pero la verdad es una historia de decadencia y autodestrucción la que vemos, mas no por ello Woody deja a un lado su diálogos irónicos, su humor negro y situaciones bizarras que en todas sus películas nos presenta. Para finalizar no me queda más que recomendar ampliamente esta película, no sólo por la actuación de Cate, sino por el duelo que hace con Sally y los maravillosos diálogos escritos por Woody.

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